Nadie dijo que innovar fuera fácil, y menos cuando el tema a cambiar
fuera único para un dispositivo de gama alta. Y es que fabricar piezas
específicas para un modelo encarece el producto y podría provocar
problemas de disponibilidad de materiales.
Eso podría estarle pasando a HTC, empresa que — se rumorea — podría
estar enfrentando problemas para fabricar todos los aparatos que
quisieran tener a la venta a causa de lo específico que es su sensor
Ultrapixel, afectando la producción en cerca de un 30%, lo que ha
provocado que muchos analistas de mercados estén disminuyendo las
proyecciones de venta del nuevo dispositivo de la taiwanesa.
Las cifras revisadas aseguran que HTC podría llegar con suerte al millón de One despachados a la mitad de 2013.
Esto tiene una consecuencia todavía mayor: Reducción de stock o, de
plano, demoras en la llegada del teléfono estrella de la compañía a
algunos mercados, dejando a los ansiosos consumidores esperando por la
llegada de la novedad a sus manos.